
La advocación católica de Nuestra Señora de Lourdes hace referencia a las 18 apariciones de la Virgen María que, de acuerdo al testimonio de santa Bernadette Soubirous (1844-1879), sucedieron en la gruta de Massabielle, a orillas del río Gave, en las afueras de la población de Lourdes, Francia, en las estribaciones de los Pirineos.
Ya en vida de Bernadette, multitud de católicos creyeron en las
apariciones de la Virgen María como vehículo de la gracia de Dios, y el
papa Pío IX
autorizó al obispo local para que permitiera la veneración de la Virgen
María en Lourdes en 1862, unos diecisiete años antes de la muerte de
Bernadette.
Bernadette Soubirous fue declarada santa por Pío XI el 8 de diciembre de 1933. Desde entonces, la advocación de la Virgen María como Nuestra Señora de Lourdes ha sido motivo de gran veneración, y su santuario es uno de los más visitados del mundo.
Apariciones
Bernadette... Continuar leyendo