🗡ESPADA ESPIRITUAL
Miércoles 5 de septiembre 2018
Qué importante es abrir las puertas de casa para que entre Jesús a reinar en nuestra familia.
Hoy vemos que entró en la casa de Pedro, la suegra estaba con fiebre y es sanada por Jesús, así nos relata el evangelio de hoy (San Lucas 4, 38-44). Recordemos cuando María estaba a punto de dar a luz a Jesús y no había lugar en ninguna familia en Belén, nadie que pudiera abrir las puertas a semejante gracia.
Abramos las puertas de nuestro corazón. Él nos dice: "Estoy a la puerta y llamo". (Apocalipsis 3, 20)
Jesús no se cansa de tocar la puerta de nuestro corazón para sanar nuestra alma y hacerse presente en nuestro interior, para reinar con su gracia, él nos quiere conceder paz, fortaleza, luz, para no equivocarnos.
"No endurezcáis vuestro corazón, sino escuchad la voz del Señor".
Él quiere unirse a nosotros cuando nos dice: "Tomen y coman, este es mi cuerpo..."